Adaptación cinematográfica a cargo del irregular Joel Schumacher del famoso musical de Andrew Lloyd Webber, a su vez inspirado en la obra de Gaston Leroux. Aunque es una película bien hecha, no es una buena adaptación, con excesos de diálogos y con licencias extras que nada tienen que ver con el musical (suponemos que para aumentar la tensión), que desvirtúa el espíritu del original.
El reparto canta y baila con ciertas limitaciones, sobre todo Gerard Butler (el Fantasma), con un registro reducido. Emmy Rossum (Cristhine) lo hace algo mejor consiguiendo un nivel aceptable. A destacar Minnie Driver como soprano.
Pero si lo que queremos escuchar grandes voces, la versión doblada española cuenta con los actores que interpretaron la obra en Madrid (Juan Carlos Barona y Julia Möeller), donde es una gozada escucharlos cantar, con la única pega de que, en la difícil tarea de coordinar imagen y diálogos, el resultado deja mucho que desear.
La puesta en escena es magnífica, no escatimando medios en decorados, vestuario y estilismo. Los efectos especiales, aunque poco, están perfectamente encajados en la historia, y destaca sobre todo la transformación del teatro al principio.
Ficha IMDB
Ver trailer
Lo Mejor. Me gustó mucho el cómo se rodó “No hay vuelta atrás”
Lo Peor. El estropicio que han hecho en lo que corresponde al final del primer acto.
¿Recomendable? Para amantes del musical, pues casi toda la película es cantada
1 comentario:
Me gustó la peli aunque se me hizo un poco larga. Y no se porqué estaba yo convencida de que acababa mal la historia, certezas incorrectas... jeje
Publicar un comentario