Otra genialidad de Pixar, que se sumerge en pleno oceano con un guión lleno de escenas y momentos a cada cual más original, como el acuario o las tortugas.
El fondo marino, visualmente perfecto, destaca por el continuo contraste de claros y oscuros y de vida y soledad.
Thomas Newman, fiel a su estilo, trabaja por primera vez para Pixar, tomando el relevo de su tío Randy. Crea una partitura que destaca por un precioso y emotivo tema principal (y sus variaciones), con momentos más incidentales que se adaptan perfectamente a las imágenes.
Mención especial se merece el doblaje, tantas veces denostado en este blog, que en esta ocasión es de lo más acertado. Prescindiendo de famosillos de moda, nombres de la talla de Jose Luis Gil (Marlin), Anabel Alonso (Dolly) o Ramón Langa (Gill) consiguen elevar aun más el nivel de la película.
Ficha IMDB
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Lo Mejor. Entre muchas cosas, los tres tiburones.
Lo Peor. La de pececitos payasos que habrán muerto en peceras desde su estreno.
¿Recomendable? Sin duda
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