Un simple cartero se cruza con un misterioso libro que trata sobre el nº 23. A partir de entonces, toda su existencia girará en torno a ese número, lo que le acabará ocasionando más de un quebradero de cabeza.
Joel Schumacher se introduce en el suspense paranoico con esta historia de obsesión en torno a numero, que parece estar en todas partes, y de cómo alguien condiciona su vida a esos dígitos. Jim Carrey vuelve al registro dramático que tantos halagos ha conseguido, pero que aquí parece caer en la sobreactuación. Pero es esta una película de excesos, con un final muy cogido por los pelos, que debemos creernos porque nos lo dice el director.
La fotografía, oscura y apagada, junto a la dirección artística logran crear la atmósfera de tensión que el film necesita.
Para la música se llamó a Harry Grewson-Williams, habitual del director, que aquí compone una partitura que se caracteriza por su atonalidad y sus ritmos electrónicos.
FICHA IMDB
Ver trailer
Lo Mejor. Las movidas que se monta el tío con el número.
Lo Peor. El giro final
¿Recomendable? Entretenida… a ratos.
Joel Schumacher se introduce en el suspense paranoico con esta historia de obsesión en torno a numero, que parece estar en todas partes, y de cómo alguien condiciona su vida a esos dígitos. Jim Carrey vuelve al registro dramático que tantos halagos ha conseguido, pero que aquí parece caer en la sobreactuación. Pero es esta una película de excesos, con un final muy cogido por los pelos, que debemos creernos porque nos lo dice el director.
La fotografía, oscura y apagada, junto a la dirección artística logran crear la atmósfera de tensión que el film necesita.
Para la música se llamó a Harry Grewson-Williams, habitual del director, que aquí compone una partitura que se caracteriza por su atonalidad y sus ritmos electrónicos.
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Lo Peor. El giro final
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