Una fea y lela empleada de una compañía de belleza se entera de algo que no debía y muere por ello. Menos mal que un lindo gatito pasaba cerca y le echará un cable.
Horrorosa película que no merece más de dos líneas para despacharla. Viene firmara por Pitof, cuyo nombre debe ser la onomatopeya de las collejas que se ha llevado por tan gran bazofia. Y si collejas le daban al director, a los que escribieron esta historia absurda con unos diálogos estúpidos, llena de situaciones irrisorias, deberían prohibirles volver a coger un bolígrafo, ni siquiera para hacer sudokus.
Como superhéroe felina tenemos a una Halle Berry en cuero negro que se limita a lucir palmito, con Sharon Stone de alter-ego, en donde el minino Medianoche le da una lección de gestos y recursos interpretativos a ambas.
Los "sorprendentes" efectos especiales ya los vimos en Spiderman dos años antes, con esa cámara moviendose entre azoteas, quedando en evidencia cuando tira de planos cercanos.
Y la banda sonora no podía ir a la zaga. Klaus Baldet nos deleita con una sucesión de ritmos electrónicos y sintetizados que se pierden entre un sinfín de temas comerciales, cuyo fin no es otro que incentivar las ventas del compacto.
Ficha IMDB
Ver trailer
Lo Mejor. Lo poco que dura.
Lo Peor. De entre todo, el guión.
¿Recomendable? ¡Válgame Dios! ¿Dónde habrá quedado la Catwoman de Tim Burton?
No hay comentarios:
Publicar un comentario