Por Navidad, a Billy le regalan un lindo animalito, de nombre Gizmo, que es una delicia. Pero Gizmo tiene tres normas: que no le de la luz, no puede mojarse y absolutamente prohibido dar de comer después de media noche. Incumplir alguna de esas normas podría tener consecuencias fatales.
Todo un clásico de los años 80 que ha sabido envejecer bastante bien. Al frente están Steven Spielberg y Frank Marshall como productores, Chris Columbus como guionista y Joe Dante como director. Dante es un referente en el cine fantástico de la década, y eso se nota a la hora de desarrollar la película.
Sin embargo, los verdaderos protagonistas son los Gremlims, malvados como nadie, pero en el fondo entrañables y queridos por el espectador. En una época donde no había planos por ordenador, el diseño de las criaturas es magnífico y 20 años después aún pueden reivindicarse.
Para la banda sonora, Jerry Goldsmith compuso una melodía inconfundible, para los gremlins malos, complementada con una más pausada, a modo de nana, que se corresponde con el tema de Gizmo.
Lo Mejor. La mala leche de los bichejos.
Lo Peor. Que ya no se hagan películas con este espíritu¿Recomendable? Por supuesto. Todo un clásico